¡Girando con Adriana del Comedor de la Milpa!

Terminamos abril con una Gira de Aprendizaje más, y esta no fue una experiencia cualquiera. Desde que partimos de Xalapa y Coatepec, los puntos de encuentro de los girantes, nuestra expectativa fue en aumento. Muy pocos habíamos visitado con anterioridad Ixóchitl, comunidad de nuestra querida Adriana. Sí, es ella, la del Comedor de la Milpa, campesina a la que conocemos por sus delicias culinarias.

La comunidad Ixóchitl pertenece al municipio de Xico. Está ubicada en las faldas del Cofre de Perote, así que para llegar empezamos a subir la montaña, la cual nos recibió con un día soleado y un paisaje de cañadas y barrancos, con variados tonos de verdes debido a la biodiversidad de la zona, además de múltiples cultivos de milpa. También, por desgracia, con la presencia de un par de monocultivos de papa, en parcelas alquiladas por “fuereños”, donde el uso de agrotóxicos es la constante.

Después de recorrer ocho kilómetros desde la cabecera municipal llegamos a la casa de la anfitriona. En esta ocasión fuimos 24 integrantes de La Gira más 10 estudiantes de la licenciatura de Ciencias de la Tierra de la UNAM, acompañados de su maestro, quienes vinieron a conocer la experiencia de economía solidaria que  da sustento a la Red y el espacio agrícola de una de las productoras.

Lúdicamente nos presentamos y nos organizamos en 4 equipos en torno a 4 grandes temas. Estos temas estaban vinculados a preguntas de nuestro interés, las cuales habíamos planteado previamente en el formato para inscribimos a la visita. Queríamos saber algunos aspectos del trabajo de Adri en su parcela, su producción, comercialización, sus retos y problemática. La sugerencia fue que a partir del recorrido al  huerto y a través de la plática y explicación de nuestra guía, pudiéramos dar respuesta a estas preguntas, y así fue.

Para socializar los comentarios cada equipo hizo uso de  la imaginación y  la creatividad. A través de dibujos, representaciones y  versos compartimos la riqueza histórica que Adriana y su tierra tienen a través de tres generaciones. Durante estas tres generaciones, su familia ha estado históricamente vinculada al campo. Ahora ella, como nieta mayor, sostiene este vínculo a través de prácticas bioculturales, combinadas con algunos aportes de la agroecología, siembra hortalizas, frutales, flores y, por supuesto, milpa. Todos coincidimos que es un verdadero paraíso. Además, ha logrado comercializar, primero de manera independiente, y ahora a través de La Gira, algunos alimentos que elabora a partir de sus productos. 

Problemas no le han faltado, pero siempre tiene metas  que ha logrado alcanzar pues para nadie quedó duda que es una mujer sui géneris: trabajadora, emprendedora, con una perspectiva de esfuerzo constante,  con mucha energía y de sonrisa dulce y contagiosa.  Buen ejemplo de mujer campesina que bien nos puede motivar a continuar girando en la vida.

Por supuesto, y como todos lo esperábamos, la comida fue un placer: atole de mora, café, quelites a la mexicana, tamales de libro, pintos, tortillas de maíz criollo.

Nos fue difícil despedirnos, pero de seguro regresaremos algún día, pues como dijo Adri, “el amor a la tierra lo arregla todo”.

A continuación, les dejamos con un poema escrito por Renée de Ren-Hacer durante la gira:

Siembro amor, siembro desde el corazón

Abono de mis ancestros

Acompañada de la luna y del sol

Conjugando la energía de las manos de mi familia, trabajando, avanzando, transmutando y creando.

Los quelites forman parte de este ciclo importante, proveyendo minerales como alimentos naturales.

Granos de maíz transformados al nixtamal, la masa, el atole, las tortillas y el tamal cocinándose bajo la alquimia del fogón, para tener éxito solo necesitamos hacerlo de corazón.

Milpa diversificada, hortaliza abundante y sagrada, llena de flores, hierbas, medicina, comida y muchos colores.

Cargándonos con toda la fuerza, defendiendo el territorio, el agua, la naturaleza…

Trabajando día con día, con mi ser en alegría, la vida en el monte toda una algarabía, las semillas y el amor es nuestra vía.

Mujer campesina dotada de fuerza divina, mujer xiqueña, mujer de sueños, mujer de la tierra que comparte su universo, en el pueblo, en el mercado, en la Gira, en la fiesta, haciendo de su maravillosa comida el más bello y delicioso verso.

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