Economía solidaria
«Construir una economía solidaria es para nosotrxs crear círculos de consumo y producción local de personas que trabajan cuidando la naturaleza en cadenas de manos y un diálogo continuo, construyendo comunidad y una postura política de resistencia. Así buscamos cuidar lo que nos cuida con amor, apoyo mutuo, respeto, solidaridad y sustentabilidad.».
Esta definición la elaboramos colectivamente en nuestra asamblea del 2020.
¿Qué es la economía solidaria?
La economía social representa una contraposición al sistema económico hegemónico, por privilegiar a las personas sobre el capital, la gestión participativa y democrática sobre la mano invisible de la economía global, y la autonomía sobre la dependencia de cadenas de producción impersonales y de explotación.
La economía solidaria va más allá del cooperativismo ; propone la construcción de relaciones de producción, distribución, consumo y financiación basadas en la justicia, cooperación, la reciprocidad , y la ayuda mutua.
La economía solidaria busca responder a las ncesidades materiales (también llamadas objetivas o tangibles) y afectivas (o subjetivas, intangibles) de las personas con base en la autogestión y la reciprocidad. Se contrapone a la economía capitalista que tiene como centro su propia reproducción basada en el lucro, la propiedad privada y la alienación del trabajo. Además, con la economía solidaria se resignifica el trabajo en función de su aportación al crecimiento personal y a la sociedad (valor de uso), sin importar su valor mercantil o de cambio.
En La Gira, la economía solidaria se vive así
A través de nuestras prácticas y actividades, buscamos hacer comunidad en el territorio. La Gira no es solo una plataforma que acerca productorxs y consumidorxs para facilitar el proceso de compra-venta de productos locales y agroecológicos, también es un terreno espacio-afectivo que nos cuida y nos respalda en lo cotidiano. La Gira alimenta el cuerpo y el corazón.
Tenemos un fondo de ahorro y préstamo para productorxs, así como un fondo emergente en caso de que suceda algún imprevisto en las entregas.
Procuramos abrir espacios de participación (económica o en labores) plurales que se adaptan a las posibilidades que cada quien tiene para cooperar y colaborar porque no todxs tenemos las mismas condiciones en este mundo tan desigual. También invitamos constantemente a pensarnos y re-pensarnos desde lo colectivo a través de espacios de reflexión grupal (comisiones de trabajo, asambleas, chat, etc.). Por ejemplo, nos hemos juntado para preguntarnos ¿Qué es un precio justo?, ¿Para quién es justo?, ¿Cómo se define?, etc. Nos estamos acercando a algunas iniciativas que tienen más experiencia en este tema para que nos asesoren y que los productores puedan establecer precios justos.
Los convivios son parte esencial de nuestro quehacer cotidiano, pues le dan sabor y vida a nuestro trabajo. Para nosotrxs, la economía solidaria es una economía para la vida que considera lo local como el espacio en que la vida se desenvuelve.
